Desde que así lo promoviera Naciones Unidas en 1992, cada 22 de Marzo tenemos una cita con una de nuestras fuentes de vida, el agua. Hoy se celebra el Día Mundial del Agua, con el fin de concienciar a la población de que el agua es un bien escaso. Puede parecer lo contrario, pero la realidad es que a pesar de que el 70% de la superficie de La Tierra está cubierta de agua, sólo un 2% es potable y la gran mayoría de este 2%, hasta un 87% se encuentra almacenada en los polos terrestres en forma de hielo.
La ONU pretende concienciar a base de hacernos pensar en los problemas que tenemos con el agua, «hoy en día hay 7 000 millones de personas que alimentar en el planeta y se prevé que habrá otros 2 000 millones para el año 2050. Las estadísticas indican que todas las personas beben de 2 a 4 litros de agua a diario, sin embargo, la mayor parte del agua que ‘bebemos’ está incorporada en los alimentos que consumimos: producir 1 kilo de carne de vacuno, por ejemplo, consume 15 000 litros de agua, y 1 kilo de trigo se ‘bebe’ 1 500 litros«.
El objetivo marcado para el Día Mundial del Agua es afrontar el crecimiento de la población mundial y garantizar el acceso a alimentos nutritivos para todos, lo cual exige una serie de medidas que todos podemos poner en práctica, como por ejemplo, consumir productos que hagan un uso menos intensivo de agua, reducir el escandaloso desperdicio de alimentos (nunca se consume el 30% de los alimentos producidos en todo el mundo y el agua utilizada para producirlos se pierde definitivamente), producir más alimentos, de mejor calidad, con menos agua y llevar una alimentación saludable.
Un problema de todos cuya solución pasa por todos y cada uno de nosotros para poder evitar las catastróficas previsiones que manejan la ONU de cara al 2025: dos tercios de la población mundial vivirán en condiciones de disponibilidad limitada de agua. Y si el mal de todos no te consuela, piensa al menos que ahorrando agua, ahorras dinero. Tu juegas…
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