«Tengo 10 años y soy de Rugari. Mi madre y mi padre murieron así que llegué aquí yo solo. Estaba durmiendo en el campo de Kibati cuando los enfrentamientos empezaron el viernes. Caminé de aquí a Goma para estar seguro. Nadie me ha ayudado todavía pero hay una familia aquí que está tratando de ayudarme dándome comida y dejándome dormir con ellos en su lona de plástico. Mi madre fue asesinada en los enfrentamientos hace 10 meses y cinco meses más tarde mi padre enfermó y también murió. Tenía cinco hermanos y hermanas que yo recuerde, pero también enfermaron y murieron así que solo quedo yo».
«Huí de Rugari con mis padres porque teníamos miedo de los enfrentamientos cuando llegaron los grupos armados. Después ellos murieron. De Rugari me fui a Kanyabyunga y después a Kibati y después llegué a Goma. Hace ya casi un año que dejé de ir a la escuela; creo que ya me he olvidado de mucho de lo que aprendí pero espero que no. Lo que más deseo es volver a Rugari y regresar al colegio. También espero poder encontrar a mis abuelos si vuelvo allí, hay gente que me ha dicho que siguen viviendo allí».
«Lo que más miedo me da son los enfrentamientos, especialmente las balas. Me gusta mucho la comida y la ropa. No tengo más ropa que la que llevo y creo que no durará demasiado porque no me la he quitado desde hace mucho tiempo. No tengo nada conmigo. La familia que me ayuda intenta darme al menos una comida al día. A veces tenemos hambre pero ahora ya estoy acostumbrado a eso».
Más de un millón de desplazados por la inseguridad en el Congo y como en todos los conflictos, los que más sufren son los más débiles. ¿Hasta cuándo va a seguir esta situación? África, sus caciques y los intereses económicos de unos cuantos sinvergüenzas, vuelven a sembrar el caos y la tragedia en una población indefensa.
Por desgracia, la historia de Gaswiga no es única. Miles de niños sufren las consecuencias del fanatismo mientras occidente mira una y otra vez hacia otro lado.
Más información: Conflicto en la República Democrática del Congo. Claves: conflicto en el Congo
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