Semana Santa. Dícese de la conmemoración anual cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret. Tiempo para los más religiosos y también para los que no lo son tanto. Quien más, quien menos, salvo algunos, ya están pensando que hacer durante estos días de ocio en los que para variar el tiempo parece que no acompaña de forma generalizada en la península.
La televisión no será un buen acompañante de las tardes lluviosas de estos días, al menos para los que no gustan de las películas de romanos, las religiosas y similares que inundan las cadenas nos guste o no, para deleite de los más fanáticos del asunto, que por otro lado, me imagino que estarán hasta los «webs» del Espartaco, de la vida de Jesús, de la de Moisés y demás que han visto en todas las Semana Santas de su vida. Esto es a volumen. ¿Cuántos años tienes? ¿35? Pues quítate los primeros ocho por ser niño y el resto es la cantidad de veces que has visto Espartaco si eres fan del tío este. En nuestro ejemplo ficticio: 27 veces, una por cada Semana Santa que has vivido… y las que te quedan.
Los amantes de la naturaleza necesitarán chubasqueros si quieren disfrutar de la misma, ya les decía antes que las previsiones meteorológicas no son para echar cohetes por ningún lado, pero bueno, luego una ducha y tan frescos, nunca mejor dicho. Los que mejor se lo pasarán sin duda son los de perfil «domingueros», esos que gustan de coger el coche y pasar un par de horas (o tres) en una buena caravana para llegar al lugar de destino elegido. La época ideal, la Semana Santa, para los fans del atasco, los gritos, las palabras malsonantes y desvaríos varios, que solo espero estén lo más contenidos posibles y que incidan de forma nula en los accidentes que se puedan provocar. Por Dios y por la Semana Santa, cuidado con el volante.
Creo yo que la lectura puede ser una de las reinas de estos días. Frío, lluvia y sin saber que hacer. ¡Anda que si nos da a todos por ponernos a leer! Para los que se queden en ciudad, el cine también puede ser una buena opción, si van con su pareja, palomitas y coca cola, preparen veinte euros por ver la película de turno. Los chavales que quieran dar sus primeros besos en la oscuridad de las últimas filas del cine, se lo pensarán muy mucho en estos tiempos. Veinte euros, se dice pronto. Dejaros de chorradas y mirar a la pantalla que no está la cosa como para tirar el dinero.
Claro que si no hubiera mal tiempo, lluvia para ser más exactos, no tendríamos paisajes como el de la fotografía que adjunto. La primavera tiene esas cosas, por un lado va y te «jode» la Semana Santa y tu te quedas con cara de tonto diciendo: «para cuatro días libres que tengo«, pero por otro lado sabes que está haciendo una buena obra, que el agua es fuente de vida y como podemos apreciar, también de belleza. Que lo pasen bien, hagan lo que hagan.
Sin Comentarios