Uno, dos, tres… catorce

Con todos los respetos, a día de hoy, no hay un espectáculo musical comparable. El sábado 15 de agosto tuve la oportunidad de poder ver a U2 en directo en el Wembley Stadium de Londres. 88.000 personas abarrotaban el segundo concierto que daba la banda irlandesa en la capital del Reino Unido. Record de asistencia a un evento en el nuevo Wembley, gracias a un impresionante escenario preparado para poder disfrutar del concierto desde todos los ángulos.

Eso si, no comenzó la cosa muy bien. Entramos al concierto a las 16:30. – Que extraño – me decía Zoe, – un concierto de tarde -. – Serán costumbres inglesas – decía yo. Pues no, no eran costumbres inglesas, simplemente se abrían las puertas con cuatro horas de antelación para evitar aglomeraciones. A eso de las ocho de la tarde, fumador uno, masticaba ansiosamente chicle tras chicle ya que no había dentro del estadio zona habilitada para esta especie en vías de extinción que somos los fumadores habituales.

Toda la ansiedad y el malestar provocado por esa entrada prematura en el recinto, se evaporó al sentarse en su batería Larry Mullen jr., que dio paso a todos los miembros del grupo. Alborozo total.

Luces, ambientación, escenografía… todo estudiado al milímetro. Una espectacular estructura se elevaba por encima del escenario. En su parte central la mayor pantalla usada nunca en una gira de conciertos, más de 500.000 pixels de vídeo componían una enorme pantalla LED de 360º que se desplegaba cambiando de tamaño a lo largo del concierto.

Más de 30 camiones conté en las inmediaciones del recinto, la mayoría seguramente para transportar el mayor escenario creado para un concierto. 50 metros de estructura para ofrecer un espectáculo de luz y sonido sin igual, The Claw (la garra), que así se llama al artefacto, es motivo suficiente para asistir al evento y disfrutar de un concierto sin igual.

Musicalmente hablando que os voy a contar. No se a quien había leído antes de asistir al concierto que no había quedado satisfecho con el repertorio. ¿Que más se puede pedir? La gira ofrecía casi lo mejor de su último disco No Line on the Horizon, del que sólo eché de menos «Stand Up Comedy». Girando la vista hacia atrás, una buena elección de temas, mezclando sus grandes clásicos con alguna joya no tan comercial como The Unforgettable Fire o MLK que sirvió para reivindicar al grito de «Hoy cantamos para ella» y mientras la pasarela se llenaba de voluntarios con máscaras con su cara, a Aung San Suu Kyi, elegida democráticamente en 1990 para dirigir Birmania y víctima de arresto desde ese día. Para mi gusto, simplemente soberbios. Os dejo el listado de canciones.

1. Breathe
2. No Line On The Horizon
3. Get On Your Boots
4. Magnificent
5. London Calling – Beautiful Day – London Bridge Is Falling Down – Blackbird
6. Elevation
7. I Still Haven’t Found What I’m Looking For – Movin’ On Up
8. Stuck In A Moment
9. Unknown Caller
10. The Unforgettable Fire
11. City Of Blinding Lights
12. Vertigo
13. Crazy Tonight – Two Tribes – O Come All Ye Faithful
14. Sunday Bloody Sunday – Rock The Casbah
15. Pride (In The Name Of Love)
16. MLK
17. Walk On – You’ll Never Walk Alone
18. Where The Streets Have No Name
19. One
20. Mysterious Ways – Norwegian Wood
21. Ultraviolet (Light My Way)
22. With Or Without You
23. Moment of Surrender

Un concierto inolvidable, con un momento inolvidable durante Moment of Surrender.

Para los que no lo hayáis visto, para los que ya lo hayáis visto, absolutamente genial… ¡¡ Uno, dos, tres… catorce !!

Más información: Como en las películas americanas… London Weekend